Descripción del Proyecto
“Cuerpos en flujo” es una instalación artística que explora la relación simbólica entre el cuerpo femenino y los humedales, tomando inspiración del ecofeminismo y de la capacidad creadora y protectora de ambos espacios.
La obra está compuesta por tres capullos suspendidos, acompañados de enredaderas, todos construidos con una estructura de alambre recubierta de papel arrugado. Estos capullos representan bolsas amnióticas y sugieren un espacio de gestación y transformación, aludiendo a la creación y protección de vida en el útero y en el humedal.
El proyecto propone una visión utópica donde tanto el cuerpo de la mujer como la naturaleza existen libres de opresión, dedicándose a mujeres que han enfrentado restricciones impuestas por estructuras patriarcales. Cuerpos en flujo invita a una reflexión sobre el respeto y cuidado hacia nuestros cuerpos y el medio ambiente, abriendo un espacio para una relación armoniosa y respetuosa.
Cuerpos en flujo de la estudiante Paula Sánchez Noreña, se destaca por el manejo intuitivo y delicado de las características propias del papel tales como su rugosidad, transparencia y tactilidad, para construir tres cuerpos protuberantes, envolventes y semi abiertos, suspendidos junto con varias enredaderas del mismo material que se extienden por el espacio, y que logran denotar de manera poética y escultórica: el cuerpo capullo/materno–un cuerpo grotesco femenino en constante proceso de transformación creadora. En contraposición, la estudiante ubica sobre el piso en el centro de la instalación, un cuerpo de agua artificiosamente contenido por un halo de luz cálida y una tela blanca plegada sobre el cual va cayendo de manera intermitente una gota de agua, y que desde una aproximación simbólica nos remite a Margo Glantz en su libro Cuerpo contra cuerpo al afirmar, ‘Colocada con precisión en una escala de valores, la mujer parece ser siempre el venero inagotable de los mitos’, un cuerpo clásico que se debate entre un ideal sagrado (reforzado por la tela y la calidez de la luz) y un cuerpo profano en constante pulsión (connotado a través del goteo que desborda de manera aguda el agua contenida). Se recomienda incluir en el texto las reflexiones que surgieron con los cambios que suscitaron el montaje, ya que esto contribuirá en sobrepasar la desarticulación que se presenta entre la propuesta inicial y el resultado final; así como desarrollar desde la escritura creativa (por ejemplo, mediante la diagramación), la conexión del proceso creativo en relación con la gestación enunciada en el texto. Por último, se recomienda trabajar con materiales sostenibles que vayan en concordancia con su interés con el Eco feminismo.
La tesis “Cuerpos en flujo” de la artista Paula Sánchez Noreña parte de un acercamiento vivencial con el agua que desencadena una investigación material en torno al paisaje de humedales de la alta montaña andina. El agua y la humedad son el elemento vivifica la mirada de la artista y que le da las claves para la lectura del ecosistema de humedal y de las formas contenidas que lo rodean, así como de las formas cavernosas y abiertas que lo habitan.
En la instalación “Cuerpos en flujo” cuelgan esculturas de capullos y enredaderas en papel —cuerpos frágiles y misteriosos— en un espacio completamente blanco mientras se escuchan un goteo denso caer sobre un cuerpo de agua viscoso. En este lugar, que hace de espejo también a los cuerpos femeninos, la artista encuentra la fertilidad del proceso de creación que invita a respirar, que genera equilibrio y fluye, al mismo tiempo que identifica las fuerzas que lo oprimen.